Prohibición de impugnación
Prohibición de impugnación
Una prohibición de impugnación es una disposición testamentaria por la que el testador obliga expresamente a sus herederos o legatarios a no impugnar la disposición. Quien la incumple, pierde su beneficio. Este puede ser la herencia, un legado o cualquier otra ventaja. Esta disposición penal también se denomina cláusula casatoria o cláusula penal.
Una prohibición de impugnación es una cláusula penal testamentaria que puede llevar a la pérdida de la parte de la herencia en caso de impugnación.
Base legal
El fundamento jurídico de la prohibición de impugnación se encuentra en el artículo 712, apartado 2, del ABGB. Allí se establece que un testador puede ordenar mediante disposición testamentaria que un heredero o legatario no pueda impugnar la disposición, pues de lo contrario perderá su beneficio.
Tales disposiciones son solo eficaces en la medida en que no se impugne únicamente la autenticidad, el sentido de la disposición, la interpretación de la cláusula penal, los contenidos contrarios a la ley o las infracciones de las normas formales imperativas. En estos casos, la impugnación sigue siendo admisible a pesar de la prohibición de impugnación.
Objetivo y función de la prohibición de impugnación
Una prohibición de impugnación permite al testador influir en el comportamiento de los beneficiarios. Su objetivo es evitar que estos impugnen la disposición de forma arbitraria o por motivos tácticos.
No solo se incluye la impugnación judicial, sino también cualquier forma de oposición a la última voluntad, como retrasar la tramitación, interponer recursos innecesarios o impugnar la interpretación.
Sebastian RiedlmairHarlander & Partner Rechtsanwälte „Wer den letzten Willen angreift, riskiert mehr als nur ein Gerichtsverfahren. Im schlimmsten Fall verliert er seinen Anspruch auf das Erbe“
Posibles afectados por una prohibición de impugnación
La prohibición de impugnación puede dirigirse exclusivamente contra:
- el heredero designado o
- un legatario.
No puede imponerse eficazmente contra los herederos legales que son llamados sin disposición.
Consecuencias jurídicas
- En caso de retirada de un beneficio (por ejemplo, de la parte de la herencia), se trata de una condición resolutoria: el beneficio desaparece si se impugna la disposición.
- En caso de orden de una carga que solo se produce en caso de impugnación (por ejemplo, el pago de una cantidad), existe una condición suspensiva.
La consecuencia: quien incumple la prohibición, pierde su ventaja y, en todo caso, se reduce a la legítima.
Excepciones a la prohibición de impugnación
Una prohibición de impugnación no es eficaz de forma ilimitada. Incluso en caso de orden eficaz, el beneficiario puede hacer valer lo siguiente:
- Dudas sobre la autenticidad o la interpretación de la disposición,
- Infracciones de las normas formales,
- Contenidos contrarios a las buenas costumbres o contrarios a la ley,
- Derechos derivados del derecho de legítima
Por lo tanto, el testador no puede imponer una prohibición total de revisión.
Sus ventajas con el apoyo de un abogado
Una prohibición de impugnación puede ser tácticamente sensata, pero entraña riesgos, tanto para el testador como para los beneficiarios. Un experto en derecho sucesorio con experiencia comprueba:
- si tal disposición es eficaz en el caso concreto,
- cómo debe formularse de forma jurídicamente segura,
- qué efectos cabe esperar en caso de litigio.